Testimonio: «Una dama blanca me detuvo al borde del infierno»
El fuerte testimonio de un hombre que fue socorrido por la Santísima Virgen María antes de morir.
El fuerte testimonio de un hombre que fue socorrido por la Santísima Virgen María antes de morir.
Según San León Magno «San Pedro fue el único escogido entre todo el mundo para ser la cabeza de todos los pueblos llamados, de todos los apóstoles y de todos los padres de la Iglesia».
Dios nos comunica por medio de su Santísima Madre que nos ama y para ello nos revela al Inmaculado Corazón de María, el medio más eficaz para nuestra salvación.
«Al Corazón de Jesús, herido por nuestro amor, venid, adorémosle». Compartimos una recopilación de Oraciones para reparar y resarcir las injurias cometidas contra el Santísimo Corazón de Jesús.
Las almas pías, hondamente afectadas por los ultrajes que el Sagrado Corazón de Jesús recibe de parte de tantos cristianos impíos y descuidados, le consagran el primer viernes de cada mes para desagraviarlo, con espíritu de reparación.
San Juan Eudes compuso una frase que se ha hecho famosa entre los creyentes. Dice así: «Para ofrecer bien una Eucaristía se necesitarían tres eternidades: una para prepararla, otra para celebrarla y una tercera para dar gracias».
Un aspecto importante de la devoción al Sagrado Corazón es reconocer la realeza de Nuestro Señor Jesucristo y someterse a su soberanía. La tradición de entronizar el Sagrado Corazón es una excelente manera de expresarlo.
El Sagrado Corazón de Jesús como devoción está ampliamente difundido dentro del pueblo cristiano. Sin embargo, entre sus demandas resalta con insistencia su reconocimiento público como rey y señor. He aquí el problema: su fiesta litúrgica y su devoción hasta pueden tolerarse, pero su injerencia en el orden civil (leyes, instituciones, tratados, palacios, etc.), no.
La Santa Madre Iglesia nos invita a consolar el herido Corazón de nuestro Señor Jesucristo, que a causa de nuestras indiferencias y nuestros pecados sigue sangrando en la espera de una feliz conversión.
«Convertirse en Adorador Perpetuo es realizar una alianza de amor con Dios, no es un compromiso con los hombres, es un compromiso con el Señor Dios todopoderoso».
La imagen del Sagrado Corazón de Jesús es una predicación sencilla y continua, pero que exhorta e insta al amor y confianza que debemos tener en Dios.
La presencia de Jesús en la Eucaristía es una realidad centralísima de nuestra fe, a tal punto que la Iglesia existe por este misterio; sin esa presencia, la Iglesia como tal, dejaría de existir.
«El Dios que me llama es Amor —se lee en uno de sus apuntes—, ¿cómo puedo circunscribir este amor, cuando para hacerlo sería demasiado pequeño el mundo entero?» Juan Pablo II.
Este himno expresa de manera concreta la doctrina de la Transubstanciación, en la cual, el pan y el vino, se convierten tras la consagración del sacerdote en el Cuerpo y la Sangre de Cristo.
Dos eventos extraordinarios contribuyeron a la institución de la Solemnidad del Santísimo Cuerpo y Sangre de Cristo: Las visiones de Santa Juliana de Mont Cornillon y El milagro Eucarístico de Bolsena.
Oración para la consagración de la familia al Sagrado Corazón de Jesús.
Esta fiesta fue aprobada en primer lugar en Polonia y España por el papa Clemente XIII, en el año 1756. En 1856 Pío IX extendió la fiesta del Corazón de Jesús a toda la Iglesia. En 1889, con León XII, se elevó a la categoría litúrgica y Pablo VI la proclamó como Solemnidad.
Iniciemos con fervor esta Novena, a fin de reparar las ofensas cometidas contra el Sacratísimo Corazón de Jesús, manantial de amor y misericordia.
El jueves posterior a la Solemnidad de Pentecostés en algunos países se celebra la fiesta de Jesucristo Sumo y Eterno Sacerdote, festividad que no aparece en el calendario de la Iglesia universal (como sí lo hacen las fiestas del Sagrado Corazón de Jesús o Jesucristo Rey del Universo), pero que se ha expandido por muchos países.
Con la gracia de Dios, San Antonio de Padua demostró a través de una mula, la presencia real de Jesús en la Eucaristía y muchos herejes se convirtieron.