¡Detente! El Sagrado Corazón de Jesús está conmigo
El «detente» es un pequeño emblema con la imagen del Sagrado Corazón de Jesús. Es propio de quien ama, llevar consigo un signo de su amado.
El «detente» es un pequeño emblema con la imagen del Sagrado Corazón de Jesús. Es propio de quien ama, llevar consigo un signo de su amado.
Iniciaremos nuestra serie de personajes de películas con Frodo Bolson, un hobbit de la Trilogía de «El Señor de los Anillos», adaptación cinematográfica de los libros del escritor inglés John Ronald Tolkien. Frodo llevará a cabo, con cierta fortuna, que para Tolkien sería «eucatástrofe», la difícil misión de destruir el Anillo único, en la mismísima Montaña del Destino, lugar desde donde había sido forjada por Sauron, el Señor Oscuro.
«Conjunto de células»; «Tejido»; «Sólo un feto». Estas son expresiones comunes usadas por las personas favorables al aborto para describir al no nacido, a fin de disminuir la humanidad de esas nuevas vidas. Sin embargo, el modo en que las personas etiquetan a los no nacidos no es lo que los define, y eso está comprobado por la vida de un pequeño niño.
Gianna Emanuela dice que el «sí» de su mamá a Dios, en medio de las complicaciones y el dolor agonizante que rodearon el embarazo y el parto, permitió que Dios construyera algo hermoso en lo que, la mayoría de la gente, consideraría una situación desesperada.
Los padres de Santa Teresita son un testimonio clarísimo de familia cristiana según el Evangelio.
La primera de las apariciones de Nuestra Señora en el siglo XX y la más importante es sin lugar a dudas las apariciones en Fátima – Portugal.
El mensaje de amor y de esperanza, que resonó y sigue resonando después de 100 años es: «Al final, mi Corazón Inmaculado triunfará».
El mes de mayo es un mes de celebraciones en Paraguay. Es llamado «el mes de la Patria» porque en él se gestó la independencia nacional. Pero, ¿cuáles fueron los motivos que impulsaron a nuestros antepasados a buscar la independencia?
A más de cien años de la aparición de la Santísima Virgen María en Fátima con «el milagro del sol» y con su bendición luminosa, la de San José y del Niño Jesús, recordemos el pedido que Nuestra Señora nos dejó aquel día: «Continúen rezando el Rosario todos los días».
El Purgatorio es, al final, el lugar en donde van las almas que, aunque se hayan salvado, no quisieron entregarse totalmente a Dios; aunque estén salvados, aún estaban muy apegados a las cosas de este mundo.
El fácil acceso a la pornografía y el bombardeo constante se ha convertido en un grave problema para los padres, pues son cada vez más niños los que visualizan este tipo de contenido, con los graves efectos que esto produce en ellos.
«Ten compasión del Corazón de Tu Santísima Madre, que está rodeado con las espinas que los hombres ingratos constantemente le clavan, sin haber quien haga un acto de reparación para quitárselas».
Por supuesto, no podemos luchar contra el pecado sin tener la mirada puesta en Cristo. Su sangre derramada por nosotros es la mayor motivación a vivir en santidad, y el mayor consuelo cuando hemos fallado en eso.
Santa Elena murió rogando a todos los que creen en Cristo que celebraran la conmemoración del día en que fue encontrada la Cruz, el tres de mayo.
Una exhortación de San Josemaría Escrivá para amar y santificar lo que hacemos día a día. «El trabajo en sí mismo no es una pena, ni una maldición o un castigo: quienes hablan así no han leído bien la Escritura Santa», nos enseña el Santo.
La Fiesta de la Divina Misericordia tiene como fin principal hacer llegar a los corazones de cada persona el siguiente mensaje: Dios es Misericordioso y nos ama a todos. «…y cuanto más grande es el pecador, tanto más grande es el derecho que tiene a Mi misericordia» (Diario, 723).
«Yo, la Hermana Faustina, por orden de Dios, he visitado los abismos del Infierno, para poder hablar a las almas sobre esto y para poder dar testimonio de su existencia. He recibido el mandato de Dios de dejarlo por escrito». Una experiencia aterradora narrada en primera persona por Sor Faustina Kowalska para que seamos conscientes de las consecuencias de nuestras acciones.
«A las almas que propagan la devoción a Mi misericordia, las protejo durante toda su vida como una madre cariñosa a su niño recién nacido y a la hora de la muerte no seré para ellas el Juez, sino el Salvador Misericordioso» (Diario, 1075).
Instrucciones que se convirtieron en el arma de Sor Faustina en la lucha contra el maligno.
Nuestro Señor Jesucristo encomendó a Sor Faustina Kowalska adorar la hora de su muerte: «Cuántas veces oigas el reloj dando las tres, sumérgete en Mi misericordia, adorándola y glorificándola; suplica su omnipotencia para el mundo entero y, especialmente, para los pobres pecadores, ya que en ese momento, se abrió de par en par para cada alma», (Diario, 1572).
Nuestro Señor Jesucristo encomendó a Sor Faustina Kowalska adorar la hora de su muerte: «Cuántas veces oigas el reloj dando las tres, sumérgete en Mi misericordia, adorándola y glorificándola (…)»