Santo Tomás de Aquino, Presbítero y Doctor
(Mateo 23, 8-12) «El mayor entre vosotros sea servidor de todos. Quien se elevare, será abajado; y quien se abajare, será elevado»
(Mateo 23, 8-12) «El mayor entre vosotros sea servidor de todos. Quien se elevare, será abajado; y quien se abajare, será elevado»
(Lucas 14, 25-33) «Todo aquel que no lleva su propia cruz y no anda en pos de Mí, no puede ser discípulo mío»
(Juan 10, 11-16) «Yo soy el pastor bueno, y conozco las mías, y las mías me conocen, –así como el Padre me conoce y Yo conozco al Padre– y pongo mi vida por mis ovejas»
(Mateo 13, 47-53) «Por eso, todo escriba instruido en las cosas del Reino de los cielos es semejante al padre de familia, que va sacando de su tesoro cosas nuevas y cosas antiguas»
(Marcos 4, 1-10. 13-20) «Aquellos, en fin, que han sido sembrados en buena tierra, son: quienes escuchan la palabra, la reciben y llevan fruto, treinta, sesenta y ciento por uno»
(Lucas 22, 24-30) «Por eso, yo les doy un reino, como mi Padre me lo dio a mí, y ustedes comerán y beberán a mi mesa en mi reino, y se sentarán en tronos para juzgar a las doce tribus de Israel»
(Mateo 23, 8-12) «El mayor entre ustedes será su servidor. Pues el que se ensalce, será humillado; y el que se humille, será ensalzado»
(Lucas 10, 1-9) «La mies es grande, y los obreros son pocos. Rogad, pues, al Dueño de la mies que envíe obreros a su mies. Id: os envío como corderos entre lobos […]»
(Juan 15, 9-17) «Como mi Padre me amó, así Yo os he amado: permaneced en mi amor. Si conserváis mis mandamientos, permaneceréis en mi amor, lo mismo que Yo, habiendo conservado los mandamientos de mi Padre, permanezco en su amor»
(Mateo 16, 13-19) «Yo te daré las llaves del Reino de los Cielos. Todo lo que ates en la tierra, quedará atado en el cielo, y todo lo que desates en la tierra, quedará desatado en el cielo»
(Lucas 10, 1-9) «La mies es grande, y los obreros son pocos. Rogad, pues, al Dueño de la mies que envíe obreros a su mies. Id: os envío como corderos entre lobos […]»