Resultado de la Búsqueda

Ay del que hace caer al prójimo

(Lucas 17, 1-6) «Es inevitable que sobrevengan escándalos, pero, ¡ay de aquel por quien vienen! Más le valdría que le suspendiesen una piedra de molino alrededor del cuello, y lo echasen al mar, que escandalizar a uno de estos pequeños. Mirad por vosotros»

El pecado que no tiene perdón

El pecado que no tiene perdón

(Lucas 12, 8-12) «Yo les aseguro que a todo aquel que me reconozca abiertamente ante los hombres, lo reconocerá abiertamente el Hijo del hombre ante los ángeles de Dios»

El pecado: Su raíz y sus consecuencias

El pecado es una ofensa directa a Dios y un rechazo frontal a la cruz de Cristo. Hoy día, parece ser, que el hombre ha optado por esa vía, y el destino al que puede conducir ese modo de proceder no puede ser otro que el vacío, la tristeza, la enemistad con Dios y la condenación eterna.

A pesar de los muchos milagros, algunos no se convirtieron

A pesar de los muchos milagros, algunos no se convirtieron

(Mateo 11, 20-24) «¡Ay de ti Corazín! ¡Ay de ti Betsaida! porque si en Tiro y en Sidón se hubiesen hecho los prodigios que han sido hechos en vosotras, desde hace mucho tiempo se habrían arrepentido en saco y en ceniza. Por eso os digo, que el día del juicio será más soportable para Tiro y Sidón que para vosotras»

El cuidado de los enfermos

El cuidado de los enfermos

(Mateo 9, 1-8) «¿Por qué pensáis mal en vuestros corazones? ¿Qué es más fácil, decir: “Te son perdonados los pecados”, o decir: “Levántate y camina?” ¡Y bien! para que sepáis que tiene poder el Hijo del hombre, sobre la tierra, de perdonar pecados –dijo, entonces, al paralítico–: “Levántate, cárgate la camilla y vete a tu casa”»

Los tesoros que se pierden

(Mateo 6, 19-23) «No os amontonéis tesoros en la tierra, donde polilla y herrumbre (los) destruyen, y donde los ladrones horadan los muros y roban»

La esclavitud del pecado

(Juan 8, 31-42) «En verdad, en verdad, os digo, todo el que comete pecado es esclavo [del pecado]. Ahora bien, el esclavo no queda en la casa para siempre; el hijo queda para siempre»

El pecado de la tibieza

El pecado de la tibieza

(Mateo 5, 13-16) «Vosotros sois la sal de la tierra. Mas si la sal pierde su sabor, ¿con qué será salada? Para nada vale ya, sino para que, tirada fuera, la pisen los hombres»

El rico Epulón y Lázaro

El rico Epulón y Lázaro

(Lucas 16,19-31) «Había un hombre rico, que se vestía de púrpura y de lino fino, y banqueteaba cada día espléndidamente. Y un mendigo, llamado Lázaro, tendido a su puerta, cubierto de úlceras»

CONTENIDO EXCLUSIVO PARA MIEMBROS.

Cómo sobrevivir entre sobornos y comisiones

Cómo sobrevivir entre sobornos y comisiones

La corrupción se extiende con facilidad, cuando las ocasiones son muchas, los beneficios elevados, y los riesgos pequeños. Y cuando vemos que, a nuestro alrededor, otros sucumben, creando un ambiente de permisividad. ¿Es posible sobrevivir a la corrupción? ¿Qué oportunidades tienen los hombres honrados?

¿Siempre es pecado sentir rabia?

¿Es pecado enojarse?

A veces podemos usar palabras duras y fuertes para despertar la conciencia de las personas que no quieren convertirse, pero debemos hacerlo con caridad y no con rabia o enojo.

Chesterton predijo nuestros tiempos oscuros

GK Chesterton predijo nuestros tiempos oscuros

Hace más de un siglo, Gilbert K. Chesterton escribió una obra maestra titulada «La balada del caballo blanco», que narra la historia de un rey que deambula con tristeza por su reino una vez católico, ahora invadido por daneses paganos. En la obra se observa la lucha por la verdad, la bondad y la belleza en un mundo caído.

Carrito de compra
×