El rico Epulón y Lázaro
(Lucas 16,19-31) «Había un hombre rico, que se vestía de púrpura y de lino fino, y banqueteaba cada día espléndidamente. Y un mendigo, llamado Lázaro, tendido a su puerta, cubierto de úlceras»
(Lucas 16,19-31) «Había un hombre rico, que se vestía de púrpura y de lino fino, y banqueteaba cada día espléndidamente. Y un mendigo, llamado Lázaro, tendido a su puerta, cubierto de úlceras»
(Lucas 12, 13-21) Y dirigiéndose a la multitud, dijo: «Eviten toda clase de avaricia, porque la vida del hombre no depende de la abundancia de los bienes que posea»