¡No robes la gloria de Dios!
(Mateo 21, 33-46) «… El reino de Dios os será quitado, y dado a gente que rinda sus frutos. Y quien cayere sobre esta piedra, se hará pedazos; y a aquel sobre quien ella cayere, lo hará polvo»
(Mateo 21, 33-46) «… El reino de Dios os será quitado, y dado a gente que rinda sus frutos. Y quien cayere sobre esta piedra, se hará pedazos; y a aquel sobre quien ella cayere, lo hará polvo»
(Lucas 16, 19-31) «Os digo: a todo el que tiene, se le dará; y al que no tiene, aún lo que tiene le será quitado»
(Mateo 20, 17-28) Mas Jesús repuso diciendo: «No sabéis lo que pedís. ¿Podéis beber el cáliz, que Yo he de beber?»
(Mateo 23, 1-12) «El mayor entre vosotros sea servidor de todos. Quien se elevare, será abajado; y quien se abajare, será elevado»
(Lucas 6, 36-38) «Sed misericordiosos como es misericordioso vuestro padre. No juzguéis, y no seréis juzgados; no condenéis, y no seréis condenados; absolved, y se os absolverá»
(Marcos 9, 2-10) Vino, entonces, una nube que los cubrió con su sombra, y de la nube una voz se hizo oír: «Éste es mi Hijo, el Amado. ¡Escuchadlo!»
(Mateo 5, 43-48) «[…] Y si no saludáis mas que a vuestros hermanos, ¿qué hacéis vosotros de particular? ¿No hacen otro tanto los gentiles? Sed, pues, vosotros perfectos como vuestro Padre celestial es perfecto»
(Mateo 5, 20-26) «[…] Ponte en paz, sin tardar, con tu adversario mientras vas con el por el camino, no sea que él te entregue al juez y el juez al alguacil; y te pongan en la cárcel. En verdad te digo, que no saldrás de allí sin que hayas pagado hasta el último centavo»
(Mateo 7, 7-12) «Si, pues, vosotros, que sois malos, sabéis dar a vuestros hijos cosas buenas, ¡cuánto más vuestro Padre celestial dará cosas buenas a los que le pidan!»
(Mateo 16, 13-19) «Bienaventurado eres, Simón Bar-Yoná, porque carne y sangre no te lo reveló, sino mi Padre celestial. Y Yo, te digo que tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificare mi Iglesia, y las puertas del abismo no prevalecerán contra ella […]»
(Lucas 11, 29-32) «Perversa generación es ésta; busca una señal, mas no le será dada señal, sino la de Jonás»
(Mateo 25, 31-46) «Yo les aseguro que, cuando no lo hicieron con uno de aquellos más insignificantes, tampoco lo hicieron conmigo’. Entonces irán éstos al castigo eterno y los justos a la vida eterna»
(Marcos 1, 12-15) «El tiempo se ha cumplido, y se ha acercado el reino de Dios. Arrepentíos y creed en el Evangelio»
(Marcos 1, 12-15) «El tiempo se ha cumplido, y se ha acercado el reino de Dios. Arrepentíos y creed en el Evangelio»
(Lucas 5, 27-32) «No necesitan médico los santos, sino los enfermos. Yo no he venido para convidar al arrepentimiento a los justos sino a los pecadores»
(Mateo 9, 14-15) «¿Pueden los hijos del esposo afligirse mientras el esposo está con ellos? Pero vendrán días en que el esposo le será quitado, y entonces ayunarán»
(Lucas 9, 22-25) «Si alguno quiere venir en pos de Mí, renúnciese a sí mismo, tome su cruz cada día, y sígame»
(Mateo 6, 1-6. 16-18) «[…] Mas tú, cuando ayunes, perfuma tu cabeza y lava tu rostro, a fin de que tu ayuno sea visto, no de las gentes, sino de tu Padre, que está en lo secreto; y tu Padre, que ve en lo secreto, te lo pagará»
(Marcos 8, 14-21) «¿Por qué estáis pensando en que no teneis panes? ¿No comprendéis todavía? ¿No caéis en la cuenta? ¿Tenéis endurecido vuestro corazón? ¿Teniendo ojos, no veis; y teniendo oídos, no oís? Cuando partí los cinco panes entre los cinco mil, ¿cuántos canastos llenos de pedazos recogisteis?
(Marcos 8, 11-13) «¿Por qué esta raza exige una señal? En verdad, os digo, ninguna señal será dada a esta generación»
Esto te permitirá poder pagar más rápido la próxima vez, en el catastro te haremos unas preguntas de seguridad, los datos de tarjeta de crédito no son guardados en este sitio web, sino procesados en un ambiente seguro en Bancard.
Cargando.. aguarde unos segundos..