En la medida en que más podamos comprender el misterio de la Sagrada Eucaristía mayores bienes y provechos podremos sacar de ella.
En este primer episodio de este curso sobre Teología de la Eucaristía estudiaremos sobre el significado de la Eucaristía que no es otra cosa sino «el sacrificio mismo del Cuerpo y de la Sangre del Señor Jesús, que Él instituyó para perpetuar en los siglos, hasta su segunda venida, el sacrificio de la Cruz, confiando así a la Iglesia el memorial de su Muerte y Resurrección. Es signo de unidad, vínculo de caridad y banquete pascual, en el que se recibe a Cristo, el alma se llena de gracia y se nos da una prenda de la vida eterna» (Compendio del Catecismo, n° 271).
La Eucaristía contiene verdadera, real y substancialmente al mismo Jesucristo, bajo las especies de pan y vino; no es un símbolo de Jesucristo, es el sacrificio mismo del cuerpo y la sangre del Señor que instituyó para que se perpetúe a través de los siglos para que nosotros podamos participar de su vida divina.
Por ello, es necesario conocer bien en qué consiste este solemne sacramento para saber aprovecharlo mejor, para que nuestra fe se mantenga firme y podamos crecer en la vida cristiana.