Miércoles II – Adviento
Evangelio según san Mateo 11, 28-30
«[…] Venid a Mí todos los agobiados y los cargados, y Yo os haré descansar. Tomad sobre vosotros el yugo mío, y dejaos instruir por Mí, porque manso soy y humilde en el corazón; y encontrareis reposo para vuestras vidas. Porque mi yugo es excelente; y mi carga es liviana».
Comentar