Un buen catequista, es un hombre de fe
El catequista, en primer lugar debe ser humilde, estar consciente que está desempeñando esa función dentro de la Iglesia en lugar de un sacerdote.
El catequista, en primer lugar debe ser humilde, estar consciente que está desempeñando esa función dentro de la Iglesia en lugar de un sacerdote.
La vida espiritual del catequista se centra en una profunda comunión de fe y amor con la persona de Jesús que lo ha llamado y lo envÃa. La manera más adecuada para alcanzar ese alto grado de madurez interior es una intensa vida sacramental y de oración.
Esto te permitirá poder pagar más rápido la próxima vez, en el catastro te haremos unas preguntas de seguridad, los datos de tarjeta de crédito no son guardados en este sitio web, sino procesados en un ambiente seguro en Bancard.
Cargando.. aguarde unos segundos..